REFLEXIONES SOBRE LOS RESULTADOS EN ITALIA
Está claro que aquí, en Italia, el primer partido está formado por un 51% de personas que no han votado. Nunca antes los votantes habían sido tan escasos.
Personalmente, prefiero a los que acudieron a los colegios electorales y anularon su papeleta. Porque por el derecho a votar, muchos han derramado sangre y por no acudir al colegio electoral, no estoy de acuerdo.
Los resultados de los que anularon su papeleta y de los que no acudieron al colegio electoral reflejan perfectamente la desconfianza total hacia nuestros políticos. Hemos visto que las elecciones de los que van a votar casi nunca reflejan las decisiones que luego tomarán nuestros políticos (elegidos por nosotros en el Parlamento Europeo). Mucha gente ya no va a votar porque se ha dado cuenta de que su voto no cuenta para nada.
Las decisiones de los políticos italianos elegidos en el Parlamento Europeo reflejan las decisiones del Congreso estadounidense, de las fábricas de armas, de la OTAN y, por no decir herejía, del gobierno israelí. A estas alturas, incluso estos últimos deciden por nosotros. Llevamos mucho tiempo pidiendo sanciones contra el gobierno israelí, pero nadie nos escucha. Y 37.000 muertos asesinados por el gobierno israelí claman justicia. ¿Por qué deberíamos votarles?
Llevamos un par de años gritando en diversas encuestas que no queremos que nuestro dinero se convierta en financiación y armas para el gobierno de Kiev. Pero nuestros políticos, elegidos por nosotros, deciden enviar armas y nuestro dinero a Kiev. Se supone que estos señores defienden nuestros derechos. Pero nos tratan como a un rebaño de ovejas, siguiendo las directrices de Washington. Llevándonos a la masacre.
En el extranjero, la situación no cambia. Incluso fuera, muchos no van al colegio electoral. Los que lo hacen, votan mayoritariamente a la derecha y a la extrema derecha. Porque el centro-izquierda, las socialdemocracias con el tiempo han perdido toda credibilidad y toda conexión con la clase obrera. Entregando millones de votos al miedo, al odio y a la caza del inmigrante.
Basta con mirar a Alemania y Austria, que parecen dispuestas a reconstruir la Gran Prusia. En España, ese partido fascista que es Vox sigue creciendo.
En Francia, Macron, con sus llamamientos a las armas contra Rusia, ha recibido una sonora paliza de sus votantes. Probablemente los franceses no tengan ningún deseo de ponerse el uniforme e ir a luchar contra Rusia por un nuevo Napoleón. Y Marina Le Pen triunfó.
Mientras, la belicista Úrsula ya ha proclamado la unión de las derechas europeas junto al gobierno ucraniano.
Veremos las alianzas que se construyen en los próximos días....