Радио VEF

Cuando Only Lovers Left Alive (2009) comienza, la cámara cae en lenta picada sobre las cabezas de Eve y Adam. Rota, unas veces sobre Detroit, otras sobre Tánger. Para. Ambos vampiros, equidistantes, salen a caminar por la ciudad. SQÜRL hace la sombra de Adam: acompaña su derrotismo con un dark rock, hecho de plomizos rasgueos de guitarra y hastío. A 6 mil km, Eve va por las calles de Tánger, bordada con los arabescos sonoros del laúd de Jozef von Wissen. Oscuridad y exotismo se atraen. Detrás de todo está Jim Jarmusch, un cleptómano cultural dispuesto a lustrar con sospechosa erudición, el género más chatarrero.

De un grupo punk, nos creemos un solo de guitarra, de bajo o de batería, pero no vemos venir "Ese solo de órgano es una pesadez". No es un error, esta placa tiene ambas cosas. Tampoco es probable que conozcamos a muchos grupos que canten sobre el picahielo clavado en el cráneo de Trotsky, o sobre dos profesores de primaria teniendo sexo frente a su clase. El álbum No more heroes (1977) es el asco por los ídolos a la velocidad de un puñetazo. El héroe ha muerto. The Stranglers llega al entierro con puros petardos. En su defensa, la banda no intentaba ser vanguardista, solo de mal gusto.

Kurt es temblor y giro. Giro 1: El saxofón es su pieza favorita, pero en Angels Around prefiere hacer scat scat scat con la guitarra. Fluctúa con falsa torpeza. Giro 2: Kurt es un jazzista de Filadelfia pero, como Rosenwinkel es alemán, para Alemania fue a hacer jazz. Giro 3: Siempre parece ir en dirección a una nota, pero gira con rapidez a favor de su corriente, como un pez. Del LP, el anzuelo lo echamos a estos dos divertimentos porque nos gusta la ondulación de Kurt y porque Passarim es una escama prestada del maestro de la Bossa Nova, Antonio Carlos Jobim. Pensamos que los peces traen paz.